Uno de estos primeros cambios ha sido la inclusión de una barra de navegación que entre otras cosas llevará a los usuarios a las aplicaciones ya adquiridas. Los primeros ejemplos están disponibles desde hoy mismo, aunque ten en cuenta que de momento los enlaces dirigen a la web del desarrollador para tramitar la compra. No obstante, la siguiente parada han sido los términos y condiciones, para poner de relieve la necesidad de que la mayor parte de la experiencia se realice "dentro de la propia aplicación" en lugar se convertirse en un mero portal de enlaces a otros sitios.
Otro de los requisitos obligatorios es que cada uno de estos programitas sea compatible con un teclado, ratón o entorno táctil, para que el usuario pueda cambiar los controles sin complicaciones en caso de ser necesario. Por último, pero no por ello menos importante, los de Redmond también se han cuidado de añadir que cada app sea compatible con las reglas que dicta Windows 8, como por ejemplo, que puedan funcionar con su gestión de tareas o los gestos de sus menús.
